Preparando vuestro viaje maravilloso a Barcelona. Hoy: transporte para llegar y hoteles para descansar.
Maletas, billetes y muchísimas ganas de llegar a tu destino ¡Barcelona! Pero ¿cómo organizar un viaje a Barcelona?
Una vez estéis aquí, el equipo de guías de Barcelonina os dará todos los servicios y facilidades; pero también queremos asesoraros en todos aquellos detalles de vuestra organización personal. Poco a poco os iremos ofreciendo consejos, recomendaciones y claves para que vuestro viaje a Barcelona sea un éxito desde el principio al fin.
Transportarse hasta Barcelona
Si todavía no has decidido como viajar hasta Barcelona, hay herramientas como virail que te ayudan en la búsqueda de diferentes medios de transporte.
Pero, empecemos por el principio: ¿qué medio de transporte has escogido para llegar a Barcelona? ¿Vienes en avión, tren, barco, coche propio…?
Tren
Llegarás a la Estación de Sants en la que encontrarás sin problema metro, taxis y autobuses así como agencia de alquiler de coches. Otro punto ferroviario en Barcelona es la Estación de Francia (la más antigua y atractiva, muy cercana a la Barceloneta y el barrio del Born) pero ha reducido mucho el tráfico y actualmente solo recibe trayectos nacionales.
Te adjuntamos el link a renfe, la compañía estatal de ferrocarril.
Avión
Aunque tenemos algún aeropuerto pequeño Girona o Reus, es seguro que si viajáis a Barcelona por el cielo llegareis al aeropuerto internacional de El Prat. Al organizar un viaje a Barcelona vamos a tener en cuenta las diferentes maneras de llegar al centro de la ciudad. Se encuentra a unos 12 kilómetros del centro así que vamos a necesitar transporte sobre
ruedas.
Un taxi hasta la Plaza Cataluña es lo más utilizado y os cuesta unos 30 €. El servicio de autobuses Aerobús os permite hacer el mismo trayecto en unos 35 minutos con un billete 5,90 €. Su frecuencia de salida es alta por lo que es una buena opción.
Otra opción es utilizar Renfe y su servicio de Rodalies (Aeroport – Maçanet-Massanes/Sant Celoni), que en un recorrido de solo tres estaciones y aproximadamente 20 minutos nos acercará a la Estación de Sants por 4,10 €.
La novedad en la red de transportes de Barcelona para llegar al centro es la línea 9 del Metro que también nos lleva a zonas centrales de la capital.
Autobuses
Buscando la forma más económica de viajar a Barcelona encontraremos en el autocar una alternativa interesante. Desde cualquier punto de España y, naturalmente de Europa, se puede llegar a Barcelona en autocares.
La compañía peninsular más conocida es Alsa. Normalmente todos los servicios de este tipo se concentran en la Estación del Norte, muy cercana al centro y con la posibilidad de enlazar con la red de metro.
Coche propio
El automóvil privado es tal vez la opción menos contemplada por el turista extranjero. También la afluencia de vehículos privados ha descendido dentro del territorio nacional, sobre todo desde la implantación del tren de alta velocidad AVE o del Euromed.
Las entradas a Barcelona más comunes son las Rondas. No os queremos engañar, el aparcamiento no es sencillo en la ciudad. Un sistema de parquímetros llamado Zona Azul os puede resolver un estacionamiento breve. Para el resto: Parkings públicos o privados. Al organizar un viaje a Barcelona ten en cuenta las app de móvil para encontrar plazas eventuales.
Una vez en Barcelona existe una buena red de transporte de la que os hablaremos en otra ocasión.
Alojarse en Barcelona
Pero seguro que estáis cansados del viaje, queréis soltar las maletas y daros una buena ducha. Llegamos al punto clave al organizar un viaje a Barcelona ¿Qué criterio habéis seguido a la hora de escoger vuestro alojamiento? Queréis estar en el centro de todas las “movidas” de la ciudad, preferís estar a dos pasos de la playa, lo vuestro es una visita 100% cultural, os enloquece ir de compras y de restaurantes o queréis descubrir una Barcelona apacible y relajante.
En Barcelona el alojamiento es variado tanto en estilos como en precios, desde albergues para los jóvenes aventureros con mochila a los hoteles más lujosos de Europa. Recordad que en los establecimientos oficiales del gremio de Hostelería habréis de abonar la tasa turística (entre 0,5 € y 2,5 € por noche).
Verdaderamente para amantes de la calma y la discreción es el Hotel Primero Primera, un hotel boutique muy acogedor, situado en una calle de zona residencial en la parte alta de Barcelona. Si además de tranquilidad buscamos lujo y refinamiento: Abac
Y si ya queremos súper-lujo pero con total esencia Barcelona: La Florida. Las vistas de la ciudad desde su terraza os dejarán sin respiración… pero enseguida la recuperaréis en su spa o en su restaurante.
Si te atrae el antiguo esplendor en los hoteles de la primera mitad del siglo XX: Palace (antiguo Ritz que ha tenido que cambiar de nombre por cuestiones legales pero que mantiene su toque chic de siempre) o Majestic de la zona del Eixample.
Esencia cosmopolita y céntrica: Cotton House, Mandarín y Meridien.
¿Soy de diseño y de vida supercool? En plan divertido, me alojo en la Casa Camper. O en Barcelo Raval en plena rambla del ídem y cerca de la Filmoteca y el casi desaparecido Barrio Chino. En plan lo más de lo más y buena cuenta corriente, una de las dos torres emblemáticas de Barcelona, el Hotel Arts.
https://www.barcelo.com/es/hoteles/espana/barcelona/barcelo-raval/
http://www.ritzcarlton.com/en/hotels/spain/barcelona
Cerca de la playa p
ara no perder ni un minuto de sol mediterráneo, tenéis variadísima oferta. Desde el Hotel Vela, donde de paso viviréis la noche loca barcelonesa, o apartamentos de playa tipo o tal vez algo más rompedor como el barrio emergente de Poble Nou: gente joven, playa, galerías de arte, un trozo vivo de la historia de Barcelona en el que encontraréis desde hostels hasta un hotel magnífico como el SB Diagonal Zero.
http://www.hoteldiagonalzero.com
¿Queréis estar en ese centro más céntrico imposible? Dos hoteles en Plaza Cataluña pero con mucha personalidad propia: Olivia Plaza y Pulitzer.
Pero si lo que queréis es un viaje en el tiempo y visitar la Barcelona del Gótico en su corazón histórico no podéis dejar la oportunidad de alojaros o por lo menos visitar el Hotel Neri o el Hotel Mercer.
Por último, no entraremos en la polémica del alquiler en webs como airbnb. Es vuestra opción. Pero lo que sí os recomendamos es no alquilar apartamentos turísticos “ilegales”. Recordad que no están regulados y no se puede confiar ni en el precio ni en la calidad.
¿Os ha entrado hambre? Normal pero es que además en Barcelona se come, muy pero que muy bien. Barcelonina os acompañará, en próximas entregas, a los lugares donde degustar todo tipo de delicias gastronómicas locales. Hasta pronto!